Romanticismo
Cuatro rimas de Bécquer
A continuación vamos a leer cuatro rimas de Bécquer y las comentaremos. Primero debéis clasificarlas por su temática teniendo en cuenta las cuatro series que se pueden distinguir:

Antes de hacer los ejercicios, señala rasgos propios del romanticismo que encuentres en ellas.
Rima VII: "Del salón en el ángulo oscuro"
Del salón en el ángulo oscuro,
de su dueña tal vez olvidada,
silenciosa y cubierta de polvo
veíase el arpa.
¡Cuánta nota dormía en sus cuerdas
como el pájaro duerme en las ramas,
esperando la mano de nieve
que sabe arrancarlas!
¡Ay! pensé; ¡cuántas veces el genio
así duerme en el fondo del alma,
y una voz, como Lázaro, espera
que le diga: «¡Levántate y anda!».
Después de explicar a qué serie temática pertenece, contesta a las preguntas:
- La base de la composición está en la metáfora. ¿Con qué se identifica la poesía? ¿Por qué?
- La rima tiene dos partes muy diferenciadas, explícalas.
- En la primera estrofa aparece una figura retórica muy utilizada por Bécquer, que contribuye a crear una atmósfera misteriosa ¿sabrías decir cuál es y en qué consiste?
- Otro de los recursos más utilizados por Bécquer es el de la comparación, explica las dos que aparecen en el poema.
Rima XXX: "Asomaba a sus ojos una lágrima"

- En esta rima son numerosas las antítesis. Señálalas. ¿Qué sentimiento aparece como causa de la ruptura?
- Explica las dos partes de al composición.
- Localiza otros recursos literarios y explícalos.
- Realiza el análisis métrico del poema.
Rima LXVI: "¿De dónde vengo?"

- Explica la estructura de la rima (partes) y las diferencias entre ellas
- Analiza las metáforas que aparecen en ella.
Rima XLI: "Tú eres el huracán y yo la alta torre"
Tú eras el huracán y yo la alta
torre que desafía su poder:
¡tenías que estrellarte o que abatirme!...
¡No pudo ser!
Tú eras el océano y yo la enhiesta
roca que firme aguarda su vaivén:
¡tenías que romperte o que arrancarme!...
¡No pudo ser!
Hermosa tú, yo altivo: acostumbrados
uno a arrollar, el otro a no ceder;
la senda estrecha, inevitable el choque...
¡No pudo ser!
- Esta rima se estructura en torno al tú y al yo. Fíjate las metáforas que se refieren a cada uno y comenta la antítesis que resulta.
- Comenta otros recursos estilísticos que destaquen en el poema.
Para saber más sobre Bécquer...
Rima XII analizada
Si necesitas hacer más práctica te ofrecemos esta rima; realiza primero los ejercicios y después comprueba las soluciones. Si te queda alguna duda, pregunta en clase a tu proferor/a.
Dos poemas de Rosalía de Castro
Poema 59, Rosalía de Castro
Dicen que no hablan las plantas, ni las fuentes, ni los pájaros, 1 Audio
ni la onda con sus rumores, ni con su brillo los astros:
lo dicen, pero no es cierto, pues siempre cuando yo paso
de mí murmuran y exclaman:
-Ahí va la loca, soñando 5
con la eterna primavera de la vida y de los campos,
y ya bien pronto, bien pronto, tendrá los cabellos canos,
y ve temblando, aterida, que cubre la escarcha el prado.
Hay canas en mi cabeza, hay en los prados escarcha;
mas yo prosigo soñando, pobre, incurable sonámbula, 10
con la eterna primavera de la vida que se apaga
y la perenne frescura de los campos y las almas,
aunque los unos se agostan y aunque las otras se abrasan.
Astros y fuentes y flores, no murmuréis de mis sueños;
sin ellos, ¿cómo admiraros, ni cómo vivir sin ellos? 15
Comprensión lectora
1) Resume el poema (aproximadamente, 100 palabras).
2) Señala su tema y sus apartados temáticos.
3) Establece la métrica, la rima y la forma estrófica utilizada.
4) Existen muchas imágenes que aluden a la comunicación del yo poético con la naturaleza: señala las más expresivas e indica su sentido.
Interpretación y pensamiento analítico
1) ¿Por qué la naturaleza llama “loca” al yo poético?
2) ¿Qué tipo de emociones se despiertan en el interior del poeta cuando observa la naturaleza? ¿Por qué?
3) Establece una relación de oposición entre la naturaleza y el yo poético: lozana/caduca, por ejemplo.
4) Indica los rasgos de la poesía romántica perceptibles en este poema.
Naturaleza gris
Cenicientas las aguas, los desnudos
árboles y los montes cenicientos;
parda la bruma que los vela y pardas
las nubes que atraviesan por el cielo;
triste, en la tierra, el color gris domina, 5
¡el color de los viejos!
De cuando en cuando de la lluvia el sordo
rumor suena, y el viento
al pasar por el bosque
silba o finge lamentos 10
tan extraños, tan hondos y dolientes
que parece que llaman por los muertos.
Seguido del mastín, que helado tiembla,
el labrador, envuelto
en su capa de juncos, cruza el monte; 15
el campo está desierto,
y tan solo en los charcos que negrean
del ancho prado entre el verdor intenso
posa el vuelo la blanca gaviota,
mientras graznan los cuervos. 20
Yo desde mi ventana,
que azotan los airados elementos,
regocijada y pensativa escucho
el discorde concierto
simpático a mi alma… 25
¡Oh, mi amigo el invierno!,
mil y mil veces bien venido seas,
mi sombrío y adusto1 compañero.
¿No eres acaso el precursor dichoso
del tibio mayo y del abril risueño? 30
¡Ah, si el invierno triste de la vida,
como tú de las flores y los céfiros,
también precursor fuera de la hermosa
y eterna primavera de mis sueños…!
Rosalía DE CASTRO
En las orillas del Sar, en Antología, Teide
En las orillas del Sar
Si pinchas en la imagen de Rosalía de Castro, podrás acceder a esta obra, una de la más destacadas de la autora.
Debes seleccionar un poema que te guste para recitarlo en clase (también lo puedes grabar en vídeo); para ello deberás ensayar mucho.
Fíjate en el ejemplo que te ofrecemos:
Romanticismo en femenino
Mira la siguiente presentación y realiza un esquema que recoja lo fundamental:
Nos vamos al teatro
Lee los siguientes fragmentos de las dos obras teatrales más importantes del Romanticismo y señala sus elementos románticos (personajes, tema, lugar…). (Antes de cada texto tienes un pequeño resumen del argumento para que entiendas mejor el fragmento).
Don Álvaro o la fuerza del sino (Duque de Rivas)
Se trata de la historia de un joven y rico indiano enamorado de Leonor, una joven de alta cuna. Don Álvaro asesina involuntariamente al padre de su enamorada e inmediatamente huye a Italia, donde es encontrado por el hermano de la joven, quien también muere a manos de don Álvaro al igual que su otro hermano. Pero, este, antes de fallecer asesina a la propia Leonor. Don Álvaro, incapaz de resistir el dolor, se suicida arrojándose por un precipicio.
(Ábrese la puerta con estrépito, después de varios golpes en ella, y entra el MARQUÉS, en bata y gorro, con un espadín desnudo en la mano, y detrás, dos criados mayores con luces)
Marqués.- (Furioso) ¡Vil seductor!… ¡Hija infame!
Doña Leonor.- (Arrojándose a los pies de su padre) ¡Padre! ¡Padre!
Marqués.- No soy tu padre… Aparta… y tú, vil advenedizo…
Don Álvaro.- Vuestra hija es inocente… Yo soy el culpado… Atravesadme el pecho. (Hinca una rodilla.)
Marqués.- Tu actitud suplicante manifiesta lo bajo de tu condición…
Don Álvaro.- (Levantándose) ¡Señor marqués!… ¡Señor marqués!…
Marqués.- (A su hija) Quita, mujer inicua. (A Curra, que le sujeta el brazo) y tú infeliz, ¿osas tocar a tu señor? (A los criados) Ea, echaos sobre ese infame, sujetadle, atadle…
Don Álvaro.- (Con dignidad.) Desgraciado del que me pierda el respeto. (Saca una pistola y la monta).
Doña Leonor.- (Corriendo hacia Don Álvaro) ¡Don Álvaro!… ¿Qué vais a hacer?
Marqués.- Echaos sobre él al punto.
Don Álvaro.- ¡Ay de vuestros criados si se mueven! Vos sólo tenéis derecho para atravesarme el corazón.
Marqués.- ¿Tú morir a manos de un caballero? No; morirás a las del verdugo.
Don Álvaro.- ¡Señor marqués de Calatrava! Mas, ¡ah!, no; tenéis derecho para todo… Vuestra hija es inocente… Tan pura como el aliento de los ángeles que rodean el trono del Altísimo. La sospecha a que puede dar origen mi presencia aquí a tales horas concluya con mi muerte, salga envolviendo mi cadáver como si fuera mi mortaja… Sí, debo morir…, pero a vuestras manos. (Pone una rodilla en tierra) Espero resignado el golpe; no lo resistiré; ya me tenéis desarmado. (Tira la pistola, que al dar en tierra se dispara y hiere al Marqués, que cae moribundo en los brazos de su hija y de los criados, dando un alarido)
Marqués. – ¡Muerto soy!… ¡Ay de mí!…
Don Álvaro.- ¡Dios mío! ¡Arma funesta! ¡Noche terrible!
Doña Leonor.- ¡Padre, padre!
Marqués.- Aparta; sacadme de aquí…, donde muera sin que esta vil me contamine con tal nombre..
Don Juan Tenorio (José Zorrilla)
Se centra en la tradición literaria del donjuán. Don Juan era un seductor nato que, por una apuesta, decide enamorar a doña Inés. La familia de la joven está en desacuerdo con la relación y don Juan asesina al padre de Inés, quien también acaba falleciendo. Pero Inés no abandona a su amado hasta que consigue que se arrepienta de sus pecados y así logre salvar su alma.
(Don Juan, la sombra de Doña Inés)
DON JUAN- (De rodillas).
¡Doña Inés! Sombra querida,
alma de mi corazón,
¡no me quites la razón
si me has de dejar la vida!
Si eres imagen fingida,
solo hija de mi locura,
no aumentes mi desventura
burlando mi loco afán.
SOMBRA- Yo soy doña Inés, don Juan,
que te oyó en su sepultura.
DON JUAN- ¿Conque vives?
SOMBRA- Para ti;
mas tengo mi purgatorio
en ese mármol mortuorio
que labraron para mí.
Yo a Dios mi alma ofrecí
en precio de tu alma impura,
y Dios, al ver la ternura
con que te llamaba mi afán,
me dijo: “Espera a don Juan
en tu misma sepultura.
Y pues quieres ser tan fiel
a un amor de Satanás,
con don Juan te salvarás,
o te perderás con él”.
Y terminamos con la prosa
La última actividad que os proponemos es un poco más complicada, pues requiere leer fragmentos de obras en prosa (algunos bastante largos) de cinco autores románticos, entre ellos los dos prosistas españoles más importantes (Bécquer y Larra). Pero si lo hacéis, podréis resolver el reto que se propone. ¿Os animáis?
¿Cuánto entiendes a los románticos?
Solución
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Pasapalabra romántico
Observa las letras, identifica y rellena las palabras que faltan.
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