Esta novela se publica en 2020 como quinta entrega de la serie Episodios de una Guerra Interminable y lleva por subtítulo "Agonía y muerte de Aurora Rodríguez Carballeira en el apogeo de la España nacional católica, Manicomio de Ciempozuelos (Madrid), 1954-1956".
En el subtítulo se especifica la trama argumental, así como el tiempo y el espacio en el que se ambienta la novela. Almudena Grandes se vale de un suceso real relacionado con la vida de Aurora Rodríguez Carballeira. Esta mujer, seguidora de las teorías eugenésicas, concibió a su hija Hildegart como un experimento científico destinado a representar a la mujer del futuro. Hasta los diecisiete años, Hildegart colma las expectativas de su madre, pues es una niña prodigio que con esa edad ya se ha licenciado en Derecho y publicado quince libros. Sin embargo, la relación entre madre e hija se va deteriorando cada vez más, ya que Aurora siente que ha perdido el poder sobre esta, por lo que, en un estado paranoico, acaba asesinándola mientras duerme.
La novela recrea la sociedad española de la época de los 50 y la situación de la psiquiatría en España mediante el relato de la última etapa de la vida de Aurora, ingresada en el sanatorio mental de Ciempozuelos por el asesinato de su hija prodigio en 1933. Los acontecimientos y personajes históricos se entremezclan con la ficción novelesca. De los 117 personajes que aparecen en la novela, 7 son reales. Entre ellos, los psiquiátras Antonio Vallejo Najera y López Ibor, así como la inteligentísima y culta doña Aurora.
La trama da comienzo con la llegada del psiquiatra Germán Velázquez, exiliado en Suiza, a España para probar el uso de un medicamento que trata la esquizofrenia, la clorpromacina, en el sanatorio de Ciempozuelos. Velázquez había huido de España al comienzo de la Guerra civil debido a la implicación de su padre en la Segunda República. El doctor reconoce a Aurora en Ciempozuelos, pues ya la conocía porque su padre, también psiquiatra, había elaborado una evaluación psiquiátrica de la mujer para el juicio de 1933. En aquel entonces, Velázquez había escuchado detrás de la puerta a Aurora confesando el crimen.
En Ciempozuelos Germán conoce también a María Castejón, una auxiliar de enfermería de origen humilde, nieta del jardinero del manicomio que siente una vinculación especial con Aurora, puesto que le había enseñado a leer y escribir cuando era niña. Entre María y Germán va a surgiendo poco a poco un sentimiento amoroso, pero la falsa moral de la época no se lo pondrá fácil, pues María es tratada públicamente como una prostituta por haber mantenido un romance con un médico que más tarde la abandona. Algunos críticos han visto en este personaje concomitancias con la Fortunata de Galdós.
Aurora, Germán y María son los protagonistas y a la vez narradores en primera persona de la historia. A través de la alternancia de estas tres voces, el lector irá conociendo los episodios más oscuros de su pasado, lo que sienten y los secretos que esconden.